Amo las flores, son gotas de belleza, pensamientos amables del Creador. El rosario, recitado con el alma, es una corona de perlas que se transforman en flores para Mí. Y las rosas de vuestras oraciones forman nubes para Mí, almohadas, senderos... Y al Cielo llegan vuestras flores, que Yo presento a Jesús, ¡y Él os sonríe!
Mi vida en Nazareth. Giuliana Buttini