Junio, mes del Sagrado Corazón de Jesús, para honrarle de manera especial.



Junio es el mes que la Iglesia ha dedicado especialmente a honrar el Sagrado Corazón de Jesús. Le ha dedicado todo un mes porque es el corazón del Verbo encarnado, del Hijo de Dios hecho hombre y le ha querido dedicar todo el mes de junio, con la finalidad de que los católicos lo veneremos, lo honremos y lo imitemos especialmente en estos 30 días.

El origen de la devoción al Sagrado Corazón de Jesús viene de Santa Margarita María de Alacoque que era una religiosa de la Orden de la Visitación. Tenía un gran amor por Jesús. Y Jesús tuvo un amor especial por ella. Se le apareció en varias ocasiones para decirle lo mucho que la amaba a ella y a todos los hombres y lo mucho que le dolía a su Corazón que los hombres se alejaran de Él por el pecado.

Durante estas visitas a su alma, Jesús le pidió que nos enseñara a quererlo más, a tenerle devoción, a rezar y, sobre todo, a tener un buen comportamiento para que su Corazón no sufra más con nuestros pecados. El pecado nos aleja de Jesús y esto le entristece porque Él quiere que todos lleguemos al Cielo.

Nosotros podemos demostrar nuestro amor al Sagrado Corazón de Jesús con nuestras obras: en esto precisamente consiste la devoción al Sagrado Corazón de Jesús. Fuente

Imágenes del monumento al Sagrado Corazón de Jesús que bendice nuestra ciudad de Oviedo,
desde el monte Naranco.

31 fin del mes de mayo, mes de María, con la oración "Al Corazón de la Divina Madre" que Jesús enseñó a Santa Matilde.

Dios Te Salve María Tere Larraín

Al Corazón de la Divina Madre
Te saludo de lo íntimo de mi alma, Corazón virginal de la Santísima Madre de Cristo,
por la afluencia de todos los bienes, con los cuales fuiste gratísimo a Dios y beneficioso a los hombres.
Te saludo, Corazón Purísimo de la niña, que fue la primera en hacer voto a su virginidad.
Te saludo, Corazón humildísimo de aquella que más que nadie mereció concebir del Espíritu Santo.
Te saludo, Corazón devotísimo y deseosísimo, que llevaste a Cristo en las entrañas de María.
Te saludo, Corazón llenísimo de caridad, ardentísimo en el amor de Dios y a los hombres.
Te saludo, Corazón fidelísimo, que conservaste diligentemente todas las palabras y las obras de Jesús.
Te saludo, Corazón pacientísimo, llagado continuamente con la espada de la pasión de Cristo.
Te saludo, Corazón excelentísimo de la piadosa Madre, que quiso y hasta prefirió
que su Hijo único fuese inmolado por la redención del mundo.
Te saludo, Corazón grandemente solícito en las oraciones, intercediendo continuamente por la Iglesia.
Te saludo, Corazón diligentísimo en la contemplación, que con tus méritos alcanzas la gracia de los hombres».   Jesús enseñó a Santa Matilde esta oración.

31 de mayo

30 de mayo: Aun en el caso de perderlo todo, teniéndole a Él tenemos todo

Ave María. Andrea Bocelli
Cuando llega la penosa hora de la huida a Egipto, es San José quien alivia mi pena, y me dice: "Aun en el caso de perderlo todo, teniéndole a Él tenemos todo". 
María Valtorta. Vida oculta de Jesús. 

30 de mayo

29 de mayo...que los hombres y las mujeres de nuestro tiempo, reconozcan en el Niño que está en tus brazos al único Salvador del mundo, fuente inagotable de la paz verdadera, a la que todos aspiran en lo más profundo del corazón

Madre del amor | Cristóbal Fones, SJ

"María, ayúdanos a ser testigos creíbles de su mensaje de paz y de amor, para que los hombres y las mujeres de nuestro tiempo, caracterizado aún por tensos contrastes e inauditas violencias, reconozcan en el Niño que está en tus brazos al único Salvador del   mundo, fuente inagotable de la paz verdadera, a la que todos aspiran en lo más profundo del corazón S.Juan Pablo II

29 de mayo
Pablo VI
El Papa Pablo VI, durante su pontificado mostró su profunda devoción a la Madre de Dios y su importancia en la historia y en la salvación del hombre. 

“Con maternal clemencia, Beatísima Virgen, a todos tus hijos. Atiende a la ansiedad de los sagrados pastores que temen que la grey a ellos confiada se vea lanzada en la horrible tempestad de los males; atiende a las angustias de tantos hombres, padres y madres de familia que se ven atormentados por acerbos cuidados, solícitos por su suerte y la de los suyos. Mitiga las mentes de los que luchan y dales “pensamientos de paz”; haz que Dios, vengador de las injurias, movido a misericordia, restituya las gentes a la tranquilidad deseada y los conduzca a una verdadera y perdurable prosperidad”. Encíclica la Christi Matri

“No dejéis de inculcar, con todo cuidado, la práctica del Rosario, la oración tan querida a la Virgen y tan recomendada por los Sumos Pontífices, por medio de la cual los fieles pueden cumplir de la manera más suave y eficaz el mandato del Divino Maestro: (Pedid y recibiréis, buscad y hallaréis, llamad y os abrirán) (Mt.7,7)”. Encíclica Mense Maio

Ella “el modelo de la perfección cristiana, el espejo de las virtudes sinceras, la maravilla de la verdadera humanidad”. “Creemos que el culto a María es fuente de enseñanzas evangélicas: en nuestra peregrinación a Tierra Santa, de Ella que es la beatísima, la dulcísima, la humildísima, la inmaculada criatura, a quien cupo el privilegio de ofrecer al Verbo de Dios carne humana en su primigenia e inocente belleza, quisimos derivar la enseñanza de la autenticidad cristiana, y a Ella también ahora volvemos la mirada suplicante, como a amorosa maestra de vida, mientras razonamos con vosotros, Venerables Hermanos, de la regeneración espiritual y moral de la vida de la Iglesia”. Encíclica Ecclesiam Suam

“La santidad ejemplar de la Virgen mueve a los fieles a levantar "los ojos a María, la cual brilla como modelo de virtud ante toda la comunidad de los elegidos". Exhortación apostólica Marialis Cultus dedicada para la recta ordenación y desarrollo del culto a María

“El Pueblo de Dios admira y venera en Ella la figura y el modelo de la Iglesia de Cristo en el orden de la fe, de la caridad y de la perfecta unión con Él. María Virgen y Madre obtenga a la Iglesia, a la que también saludamos como virgen y madre, el que se gloríe humildemente y siempre de la fidelidad de sus sacerdotes al don sublime de la sagrada virginidad, y el que vea cómo florece y se aprecia en una medida siempre mayor en todos los ambientes, a fin de que se multiplique sobre la tierra el ejército de los que siguen al divino Cordero adondequiera que él vaya (Ap 14, 4)”. Encíclica Sacerdotalis Caelibatus. Fuente: aciprensa

28 de mayo: La Virgen María, Madre del Salvador, Esposa del Espíritu Santo, se acerca a nosotros y nos habla al corazón, nos invita a unirnos a Ella en defensa de la Obra de su Hijo amado

María


La Virgen María, Madre del Salvador, Esposa del Espíritu Santo, se acerca a nosotros y nos habla al corazón, nos invita a unirnos a Ella en defensa de la Obra de su Hijo amado. 
El libro del Padre Gobbi.
28 de mayo

Ven, Espíritu divino,

manda tu luz desde el cielo.

Padre amoroso del pobre;

don en tus dones espléndido;

luz que penetras las almas;

fuente del mayor consuelo.

Ven, dulce huésped del alma,

descanso de nuestro esfuerzo,

tregua en el duro trabajo,

brisa en las horas de fuego,

gozo que enjuga las lágrimas

y reconforta en los duelos.

Ven, Espíritu enviado por el Padre,

en nombre de Jesús, el Hijo amado:

haz una y santa a la Iglesia

para las nupcias eternas del Cielo.



27 de mayo: La pureza tiene un valor tal, que un seno de criatura pudo contener al Incontenible, porque poseía la máxima pureza posible en una criatura de Dios.

Dios Te Salve María. Betsaida

La pureza tiene un valor tal, que un seno de criatura pudo contener al Incontenible, porque poseía la máxima pureza posible en una criatura de Dios.
El Evangelio como me ha sido revelado. María Valtorta.
27 de mayo

Se me ha dado pleno poder en el cielo y en la tierra.

 





Santisima Trinidad


Oh Dios mío, Trinidad a quien adoro, ayúdame a olvidarme de mí por completo para establecerme en ti, inmóvil y apacible como si ya mi alma estuviera en la eternidad; que nada pueda turbar mi paz ni hacerme salir de ti, oh mi inmutable, sino que cada minuto me lleve más lejos en la profundidad de tu misterio. Pacifica mi alma, haz en ella tu cielo, tu morada amada y el lugar de tu reposo; que yo no te deje en ella nunca a solas; que yo esté allí enteramente, completamente despierta en mi fe, toda adoración, completamente entregada a tu acción creadora.

Oh mi Cristo amado, crucificado por amor, yo quisiera ser una esposa para tu corazón; quisiera cubrirte de gloria, quisiera amarte... hasta morir. Pero siento mí impotencia y te pido que me revistas de ti mismo, que identifiques mi alma con todos los movimientos de tu alma, que me sumerjas, que me invadas, que me sustituyas, a fin de que mi vida no sea más que una irradiación de tu vida. Ven a mí como Adorador, como Reparador y como Salvador.

Oh Verbo eterno, Palabra de mi Dios, quiero pasar mi vida escuchándote, quiero convertirme totalmente en deseo de saber para aprender todo de ti; y después, a través de todas las noches, de todos los vacíos, de todas las impotencias, quiero fijarte siempre y permanecer bajo tu gran luz; oh mi Astro amado, fascíname para que ya no pueda salir de tu resplandor.

Oh Fuego que consume, Espíritu de amor, ven a mí a fin de que se produzca en mi alma como una encarnación del Verbo; que yo le sea una humanidad ańadida en la que él renueve todo su misterio. Y tú, Padre, inclínate sobre tu pobre y pequeńa criatura, cúbrela con tu sombra, no veas en ella más que al Bienamado en el que has puesto todas tus complacencias.

Oh mis "Tres", mi Todo, mi Beatitud, Soledad infinita, Inmensidad en que me pierdo, yo me entrego a ti como una presa, entiérrate en mí para que yo me entierre en ti, esperando ir a contemplar en tu luz el abismo de tu grandeza (Isabel de la Trinidad, "Oración a la Santísima Trinidad", en A. Hamman, Compendio de la oración cristiana, Edicep, Valencia 1990, p. 204).



Ven, Espíritu Santo, por tu don de Temor de Dios, hiere nuestros cuerpos con tu temor para así trabajar por la salvación de nuestras almas.

Lo que no es

Puede interpretarse que el temor de Dios es miedo a Dios, pero ese sentimiento no responde a la revelación divina. "En esto se produjo una tempestad tan fuerte, que la barca desaparecía entre las olas; él dormía. Se acercaron y lo despertaron gritándole: "¡Señor, sálvanos, que perecemos!" Él les dice: "¿Por qué tenéis miedo, hombres de poca fe?" (Mt 8, 24-26)

Lo que es

Sobre todo: temor filial, que es el amor de Dios: el alma se preocupa de no disgustar a Dios, amado como Padre, de no ofenderlo en nada, de "permanecer" y de crecer en la caridad" (cfr Jn 15, 4-7). "¡Qué deseables son tus moradas, | Señor del universo! Mi alma se consume y anhela | los atrios del Señor, | mi corazón y mi carne | retozan por el Dios vivo. Hasta el gorrión ha encontrado una casa; | la golondrina, un nido | donde colocar sus polluelos: | tus altares, Señor del universo, | Rey mío y Dios mío" (Sal 83, 2-4).

Santa Teresa de Jesús: "En fin, nadie la puede quitar la paz, porque ésta de sólo Dios depende. Y como a El nadie le puede quitar, sólo temor de perderle puede dar pena, que todo lo demás de este mundo es, en su opinión, como sino fuese, porque ni le hace ni le deshace para su contento. (Fundaciones 5,7)

Los Papas

"De este santo y justo temor, conjugado en el alma con el amor a Dios, depende toda la práctica de las virtudes cristianas, y especialmente de la humildad, de la templanza, de la castidad, de la mortificación de los sentidos" (Juan Pablo II).

"Este temor de Dios es deseo de hacer el bien, de vivir en la verdad, de cumplir la voluntad de Dios" (Benedicto XVI).

"Es el temor a alejarse de Dios, el temor de no ser felices, el temor de errar el camino de felicidad que Él nos propone" (Francisco).

Súplica

Espíritu Santo, concédenos el don de Temor de Dios por el que siempre nos mantengamos conscientes de nuestra fragilidad y seguros de su misericordia.

Regalo del don de Temor de Dios

"Así pues, el que crea estar en pie, mire no caiga (1Co 10, 12). Fuente



26 de mayo: San Felipe Neri: Dejadme abrazar a mi Madre que ha venido a visitarme

Madre del amor | Cristóbal Fones, SJ

"¡Mi hermosa Señora!
"Mi santa Señora!"
"Dejadme abrazar
a mi Madre que
ha venido a
visitarme“
S. Felipe Neri.
El santo de la alegría se celebra el 26 de mayo
26 de mayo
Aparición de la Virgen y curación: Fue siempre de salud delicada. En cierta ocasión, la Santísima Virgen se le apareció y le curó de una enfermedad de la vesícula. El suceso aconteció así: el santo había casi perdido el conocimiento, cuando súbitamente se incorporó, abrió los brazos v exclamó: "¡Mi hermosa Señora! "Mi santa Señora!" El médico que le asistía le tomó por el brazo, pero San Felipe le dijo: "Dejadme abrazar a mi Madre que ha venido a visitarme". Después, cayó en la cuenta de que había varios testigos y escondió el rostro entre las sábanas, como un niño, pues no le gustaba que le tomasen por santo...
"El santo de la alegría", "el santo humorista", dijo Goethe. El apóstol de Roma desbarata los estereotipos tradicionales de la santidad. En una época en la que la reforma tridentina imponía una, disciplina rigurosa, empleando para tal fin el Santo Oficio, el índice, la Inquisición, Felipe Neri tranquilizaba, consolaba y atraía al camino de Dios "con gran alegría y facilidad" a quienes se confiaban a él.
Entre todos los santos que contribuyeron a la reforma tridentina, la figura de Felipe Neri es la más pintoresca y cautivadora. Se trata de un hombre que suscita entusiasmo. Su humor, su vena bromista, su tendencia natural a la alegría -muy diferentes de las prácticas austeras de la época-, hicieron que encontrara muchos discípulos. No cabe duda de que aquella alegría le venía de la conciencia continua de la presencia de Dios. Pero antes de comprender la profundidad de su espiritualidad y de conocer los dones y favores místicos con los que había sido colmado, se siente uno conquistado por sus dones naturales: una suavidad radiante, una mezcla de perspicacia y de payasadas, una gran sensibilidad musical y un profundo amor por la belleza de la naturaleza, un realismo pleno de sabiduría y de sentido práctico. Como la melancolía es mala consejera, puso la alegría en el primer puesto, junto a la sencillez y a la dulzura: nada de austeridad desalentadora, sino piedad afectiva, caridad, asambleas calurosas.
En el clima de la reforma católica romana, en cuyo servicio trabajaron hombres fuertes, vigorosos y, en ocasiones, implacables, como Pablo IV, san Ignacio de Loyola, san Carlos Borromeo o san Pío V, Felipe Neri se abrió un camino original. Humanizó la religión inventando un modelo de confianza y de moderación al que se han vuelto con interés los siglos posteriores (J. Delumeau [ed.], Storia dei Santi e della Santitá cristiana, Milán 1991, VIII, pp. 99ss). Fuente: santaclaradeestella.es

Ven, Espíritu Santo, por tu don de Piedad, inspíranos a vivir sobria, justa, y piadosamente en esta vida, para alcanzar el cielo en la otra vida.

 

Lo que no es

Se puede confundir piedad con pietismo; piedad por sensiblería, cuando la verdadera piedad se manifiesta en obras de amor. "Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí; llorad más bien por vosotras y por vuestros hijos (Lc 23, 28).

Lo que es

Es regalo del Espíritu Santo, y a la vez que nos deja gustar el favor compasivo del Señor, nos mueve al trato obsequioso con Él y con nuestros semejantes.

Santa Teresa de Jesús: "Pues quiero concluir con esto: que siempre que se piense de Cristo, nos acordemos del amor con que nos hizo tantas mercedes y cuán grande nos le mostró Dios en darnos tal prenda del que nos tiene; que amor saca amor" (Vida 22, 14).

Los Papas

"El don de la piedad, además, extingue en el corazón aquellos focos de tensión y de división como son la amargura, la cólera, la impaciencia, y lo alimenta con sentimientos de comprensión, de tolerancia, de perdón" (Juan Pablo II).

"El don de piedad, mantiene viva en el corazón la llama del amor a nuestro Padre que está en el cielo, para que oremos a él cada día con confianza y ternura de hijos amados" (Benedicto XVI).

La piedad, como don del Espíritu Santo, se refiere más bien a nuestra relación con Dios, al auténtico espíritu religioso de confianza filial, que nos permite rezar y darle culto con amor y sencillez, como un hijo que habla con su padre. Es sinónimo de amistad con Dios (Francisco).

Súplica

¡Ven, Espíritu Santo, y transforma nuestra actitud religiosa en opción creyente y comprometida! ¡Haznos piadosos y coherentes, conscientes de tus dones y generosos, fieles y agradecidos!

EL regalo del don de Piedad

"Vosotros, pues, orad así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu Nombre" (Mt 6, 9). Fuente

25 de mayo: María esté siempre esculpida en tu mente y grabada en tu corazón». Expresiones de amor del Padre Pío a la Virgen María.

Dios nos salva en ti María. Salomé Arribita

«La Virgen Dolorosa te tenga siempre grabada  en su corazón materno».
«La Virgen Madre tenga siempre su mirada en ti y te conceda experimentar todas sus dulzuras maternas».
«María esté siempre esculpida en tu mente y grabada en tu corazón». 
Expresiones de amor del Padre Pío a la Virgen María
25 de mayo