Si bien la Gloria de Dios y de la Santísima Trinidad son inefables,
mediante la música podemos aproximarnos mejor.
Mostramos la más íntima de Vivaldi, la majestuosa de Bach y
la pregunta de Hakuna "Enséñame, ¡oh Trinidad!, cómo es tu libre mirada"
Mirada Creadora, creando; la del Salvador, salvando
Mirada de verdad sincera, mirada de Rey que reina
Enséñame, ¡oh Trinidad!, cómo es tu libre mirada
Enséñame, ¡oh Trinidad!, pues es la más bella y preciada
La más pura de amor
Perdóname si cuando miro, miro sin mirar
Enséñame, ¡oh Trinidad!, cómo es tu libre mirada
Enséñame, ¡oh Trinidad!, cómo es tu libre mirada
Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo yo te adoro profundamente y Os ofrezco el Preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Jesucristo, presente en todos los sagrarios de la tierra, en reparación por las ofensas, sacrilegios e indiferencias con los que Él mismo es ofendido y por los infinitos méritos de su Sagrado Corazón y del Inmaculado Corazón de María, te pido la conversión de los pecadores. (Oración del Ángel de las apariciones de Fátima)
Oración de Santa Isabel de la Trinidad
Dios mío, Trinidad que adoro,
ayúdame a olvidarme
enteramente de mí mismo
para establecerme en ti,
inmóvil y apacible
como si mi alma estuviera
ya en la eternidad;
que nada pueda turbar mi paz,
ni hacerme salir de ti, mi inmutable,
sino que cada minuto me lleve más lejos
en la profundidad de tu Misterio.
Dios mío, Trinidad que adoro,
ayúdame a olvidarme
enteramente de mí mismo
para establecerme en ti,
inmóvil y apacible
como si mi alma estuviera
ya en la eternidad;
que nada pueda turbar mi paz,
ni hacerme salir de ti, mi inmutable,
sino que cada minuto me lleve más lejos
en la profundidad de tu Misterio.
Pacifica mi alma.
Haz de ella tu cielo,
tu morada amada y el lugar de tu reposo.
Haz de ella tu cielo,
tu morada amada y el lugar de tu reposo.
Que yo no te deje jamás solo en ella,
sino que yo esté allí enteramente,
totalmente despierta en mi fe,
en adoración, entregada sin reservas
a tu acción creadora. Amén
sino que yo esté allí enteramente,
totalmente despierta en mi fe,
en adoración, entregada sin reservas
a tu acción creadora. Amén