1. Santo Tomás de Aquino
"La Eucaristía produce una transformación progresiva en el cristiano. Es el Sol de las familias y de las Comunidades".
2. San Agustín
"Señor, tú alegras mi mente de alegría espiritual. Cómo es glorioso tu cáliz que supera todos los placeres probados anteriormente”.
3. San Francisco de Asís
"Cuando no puedo asistir a la Santa Misa, adoro el Cuerpo de Cristo con los ojos del espíritu en la oración, lo mismo que le adoro cuando le veo en la Misa”.
4. San Alfonso María de Ligorio
"Tened por cierto el tiempo que empleéis con devoción delante de este divinísimo Sacramento, será el tiempo que más bien os reportará en esta vida y más os consolará en vuestra muerte y en la eternidad. Y sabed que acaso ganaréis más en un cuarto de hora de adoración en la presencia de Jesús Sacramentado que en todos los demás ejercicios espirituales del día”.
5. San Francisco de Sales
"La oración, unida con ese divino sacrificio de la Misa, tiene una fuerza indecible; de modo que por este medio abunda el alma de celestiales favores como apoyada sobre su Amado".
6. Santa María Goretti
"La Santa Eucaristía es la perfecta expresión del amor de Jesucristo por el hombre, es la quinta esencia de todos los misterios de su vida”.
7. San Luis María Griñón de Monfort
"Antes de la Comunión... suplica a esta bondadosa Madre que te preste su corazón para recibir en él a su Hijo con sus propias disposiciones”.
8. Santa Teresa de Jesús
"Acabando de recibir al Señor, pues tenéis la misma persona delante, procurad cerrar los ojos del cuerpo y abrir los del alma, y miraros al corazón”.
Fuente: aciprensa