Via Crucis. Meditaciones de San John Henry Newman.
Pasión: Viacrucis de Hakuna
Viacrucis con dibujos de Fano
Viacrucis simplificado y dimensiones para un móvil.
14 sacerdotes en el camino de Cristo a la cruz
Tantum Ergo / Anima Christi
Según enseña la Iglesia Católica, la indulgencia plenaria elimina totalmente la pena temporal que merecemos por nuestros pecados y que aún tenemos pendiente de purificar en el purgatorio. Se aplica a los pecados ya perdonados, de modo que el alma queda limpia, como un recién bautizado. Para obtenerla, sigue estas condiciones:
Jueves Santo: Asiste a la Misa de la Cena del Señor, y recita piadosamente el himno eucarístico “Tantum ergo” (Adorad postrados) en el momento de la reserva eucarística / Visita y adorar el Santísimo Sacramento reservado en el Monumento por al menos 30 minutos.
Viernes Santo: Asiste con piedad y devoción a la adoración de la Cruz en la solemne celebración de la Pasión del Señor / Participa devotamente en el Vía Crucis.
Sábado Santo: Reza el Rosario con 2 ó más personas./ Asiste a la Vigilia Pascual por la noche y renueva las promesas del Bautismo.
Además de la obra, debes rechazar todo afecto hacia cualquier pecado, incluso venial, y también confesarte, comulgar y rezar por las intenciones del Papa (un Padre Nuestro y un Ave María o cualquier otra fórmula según la piedad y devoción).
Si bien puedes cumplir estas condiciones unos días antes o después de realizar la obra, conviene comulgar y orar el mismo día. Recuerda que con una Confesión se pueden obtener varias indulgencias, aunque es mejor confesarse con frecuencia para ahondar en la conversión y pureza de corazón. En cambio, con una sola Comunión y oración por el Papa sólo se gana una indulgencia plenaria. Fuente: aciprensa