Oye y ten entendido, hijo mío el más pequeño, que es nada lo que te asusta y aflige. No se turbe tu corazón, no temas esa ni ninguna otra enfermedad o angustia.
¿Acaso no estoy aquí yo, que soy tu madre? ¿No estás bajo mi sombra? ¿No soy tu salud? ¿No estás por ventura en mi regazo?
Palabras de la Virgen de Guadalupe a Juan Diego
(Juanito, el más pequeño de mis hijos)
(Juanito, el más pequeño de mis hijos)